Son también los mismos países que encabezan la lista de los países con menos corrupción política elaborada por Transparency International. No se trata evidentemente de una casualidad. Son países que se caracterizan por su proverbial rigor científico, su racionalidad en la toma de decisiones, sus cuentas públicas saneadas, su clase política competente, humilde e incorrupta, dedicada al bienestar y la libertad de su pueblo. En varios de esos países más avanzados, bien conocidos por tener los más exigentes estándares de calidad, las autoridades sanitarias otorgan el monopolio de las manipulaciones vertebrales a los doctores en quiropráctica, tomando en cuenta que son los únicos profesionales sanitarios con una larga formación universitaria dedicada enteramente a ese acto terapéutico y concluida por un año de práctica en clínica universitaria bajo supervisión, y por lo tanto los únicos que pueden asegurarles el máximo nivel de competencia y seguridad. En  Europa, la quiropráctica está considerada como profesión sanitaria en varios países abarcando más de la mitad de su población, principalmente en el norte de Europa. En 2010, la Comisión de Sanidad del Parlamento Europeo expresó su preocupación por esa falta de reconocimiento homogéneo de la quiropráctica en la UE e instó a los países más rezagados a proceder a dicha regulación. En 2012, el Comité Europeo de Normalización, a instancia de la Comisión Europea, publicó las Normas Europeas sobre la profesión quiropráctica en la UE, primera profesión sanitaria en beneficiarse de ese procedimiento, para facilitar ese reconocimiento generalizado.